María vivió entre los siglos XIV y XV, en el Toledo multicultural. Fue una beata famosa de la época, hija de dos personas cristianas de Toledo, hermana de la priora del monasterio de San Pedro de Dueñas y sobrina del arzobispo de Toledo. Con estos datos, es evidente que María pertenecía a la clase alta de la ciudad. Sus padres la dedicaron a la vida monástica, algo muy común en aquella época, sin embargo, cuando María dejó atrás su infancia y aunque le ofrecieron el cargo de abadesa del monasterio de Santa Clara en Tordesillas, decidió no tomar los votos y se dedicó a la mendicidad en Toledo con su aya, una viuda con la que vivió durante muchos años. Esta era otra forma de vida religiosa, sin tomar los hábitos, pero dedicándose totalmente a la espiritualidad. Paseó su pobreza voluntaria por muchas villas, entre otras la de Talavera, donde ocupó una casa pequeña deshabitada y se dedicó a la experiencia eremita. Después de 1369 regresó a Toledo y vivió en un beaterio (lugar donde viven b
Comentarios